Si alguna vez has comprado un cactus por ser “una especie muy fácil de cuidar” ¿pero aun así lo echaste a perder? entonces has llegado al lugar correcto. Aunque hacer crecer un cactus feliz y saludable no parezca ser un gran reto, lo que determinará la supervivencia de la planta. Es por ello, en este artículo te diremos 4 acciones básicas de como cuidar un cactus en casa, para que pueda crecer saludable.
El Perú es el segundo lugar de mayor abundancia en géneros y especies de cactus en el mundo, ya que pueden crecer en casi todos los ecosistemas, desde desiertos costeros, puna, valle, vertiente occidental y bosques tropicales. Cualquier variedad de cactus puede crecer bien en cualquier espacio, y si te encuentras interesado en tipos de plantas pequeñas para interiores de casa , está es considerada la más resistente y perfecta esto va a depender únicamente de las acciones de cuidado que tengas hacia él/ella.
¿Cómo cuidar un cactus en casa?
Para saber como cuidar un cactus en casa es esencial saber el tipo de planta que es el cactus. Los cactus son plantas que pertenecen al grupo de las cactáceas, y la característica principal de estas plantas es que acumulan agua en los tejidos para adaptarse al ambiente que los rodea, esto los hace resistentes y en consecuencia requieren de pocos cuidados. A continuación te mencionamos las acciones necesarias para el cuidado de tu cactus.
Acción N°1: Revisa la humedad de tu maceta
Las macetas de tus plantas siempre deben tener un orificio de drenaje, esto es necesario para garantizar que el suelo drene completamente y así las plantas tengan la posibilidad de crecer saludables. Los cactus, como cualquier otro tipo de suculentas, se pudrirán si las riegas en exceso. La manera más sencilla de determinar la necesidad de humedad es guiándose por las estaciones del año.
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Durante la primavera y el otoño, los cactus necesitan un riego regular. Mientras que en verano, necesitarán menos agua, lo recomendable es una vez a la semana. Del otro extremo, un cactus puede palidecer si lo privas demasiado de agua, cuando esto suceda deberás ajustarlo según sus necesidades.
Acción N°2: Renueva el aire de tu ambiente
El agua, calor y aire mientras las plantas crecen significan crecimiento sano. Los cactus y otras suculentas pueden tolerar el aire seco, incluso el aire de los departamentos y casas en invierno que suelen ser más secos que el de los desiertos. La estación más dura para las suculentas son los inviernos, por ello si vives en lugares de invierno muy frío, toma las siguientes precauciones:
- En verano deben procurar mantenerlas en un lugar ventilado, al aire libre.
- Desde otoño, mantenerlas en el interior.
- Mantenerlas en lugares de aire fresco las fortalece para resistir el ataque de hongos y plagas.
Acción N°3: Asegura una cuota diaria de luz
Al cuidar plantas como los cactus se tiende a creer que debemos emular las condiciones del desierto para poder obtener los mejores resultados. Esto no es del todo cierto. El cactus se encuentra preparado para soportar climas cálidos y secos, pero dependiendo de su especie necesitará una dosis diferente de luz y calor para crecer mejor. En términos simples se sugiere seguir la siguiente regla: más espinas, más sol.
Las especies que presentan espinas más pequeñas, o en menor cantidad, tienden a crecer cerca a la protección y sombra de otras especies más fuertes y grandes. No obstante, igual necesitan de la luz para poder sobrevivir. Recomendamos colocar los cactus en un espacio donde puedan obtener al menos de 6 a 8 horas de luz al día directa o indirecta según su cuenta espinoza.
Acción N°4: Revisa tu cactus de forma periódica
La mejor manera de prevenir o tratar una enfermedad es detectarla a tiempo… ¿Suena conocido?
Esta afirmación es tan válida para humanos como al momento de cuidar las plantas, especialmente los cactus.
Para poder cuidar su cactus de forma correcta, lo debe inspeccionar cada 2 o 3 días en busca de señales de presencia de insectos, hongos u otros. Esto para poder cambiar la tierra afectada y limpiar la superficie o planta con agua, jabón y un hisopo o cepillo para removerlos.
En casos de cambios de color o persistencia del mal anterior, será necesario aplicar un plaguicida biológico de preferencia.
Debido a la tipología de sus hojas, los cactus son especialmente susceptibles a bichos chupadores como ácaros y pulgones, sin embargo, no son especies que promuevan su reproducción debido a la ausencia de hojas y tallos donde estos puedan colocar sus huevos.
La enfermedad más común es la podredumbre: debido a un riego muy frecuente o exceso de humedad en el ambiente o tierra del cactus, ciertas partes se van pudriendo. La forma más eficiente de combatir este mal es cortando la parte afectada y rociando como un fungicida el tejido expuesto como Tiram.
Espero que este artículo te haya servido de mucha ayuda para el cuidado correcto de tus cactus en casa y no los eches a perder durante su crecimiento, por alguna enfermedad o descuido. Recuerda que está es considerada la más resistente y perfecta, entre los tipos de plantas pequeñas para interiores de casa. Si en el caso te encuentras interesado en tener una, desees regalar a alguien especial o desees iniciar tu negocio en redes sociales.
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